NOVEDADES






¡¡NUEVO!!

Mi trabajo de Memoria de Licenciatura sobre la Iglesia Barroca de San Cayetano en Madrid,

que presenté en 1984, lo he publicado en este enlace:

https://maitearte.wordpress.com/2017/05/02/memoria-de-licenciatura-sobre-la-iglesia-de-san-cayetano-de-madrid/




       
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lunes, 11 de mayo de 2015

Moisés y David - ICONOGRAFÍA DESPUÉS DE LA PAZ DE LA IGLESIA. ANTIGUO TESTAMENTO II



ICONOGRAFÍA DESPUÉS DE LA PAZ DE LA IGLESIA.
ANTIGUO TESTAMENTO II.


EL ÉXODO: MOISÉS Y LAS TABLAS DE LA LEY


1 – LA INFANCIA DE MOISÉS

En el Éxodo (salida) se narran los orígenes de Israel como comunidad nacional.

Con el tiempo los descendientes de Jacob se convirtieron en un pueblo muy numeroso en Egipto y esta situación causó preocupación.

Se impuso a los hebreos los trabajos más duros y un faraón, precursor de Herodes, ordenó que todos sus hijos varones recién nacidos fueran arrojados al Nilo. (Matanza de los Inocentes)

A los 3 meses de nacer Moisés, su madre le colocó en un canastillo que había hecho con juncos y lo dejó en la orilla del Nilo, quedando su hermana cerca para ver que sucedía.

Cuando la hija del faraón fue a bañarse al río encontró el canastillo. 

En ese momento se acercó la hermana de Moisés y dijo que conocía a una nodriza hebrea que podía amamantar al niño. De este modo le crió su propia madre.

La princesa le adoptó, le puso de nombre Moisés (salvado de las aguas) y creció en la corte con lujo y suntuosidad.

Nicolás Poussin en “Moisés arrojado a las aguas” plasma el momento en el que la madre deposita el canastillo con el niño en el río, cerca de su hija, mientras que su padre y su hermano mayor, Aarón, se marchan afligidos. (p.213)

En el Renacimiento, Veronés plasma a un Moisés salvado de las aguas (Museo del Prado), como una escena cortesana, vistiendo a la princesa egipcia y a su séquito según la moda de la época.

Los pintores orientalistas del siglo XIX, fascinados por el exotismo oriental, insistieron en una marcada sensualidad de la escena. (p. 213)

Moisés salvado de las aguas es una clara prefiguración de Jesús, salvado de la Matanza de los Inocentes con la Huída a Egipto.


2 – HUIDA DE MOISÉS A MADIÁN

Un día Moisés observó como maltrataban a un hebreo y para defenderle mató al agresor, por este motivo tuvo que marcharse de la corte y retirarse al desierto de Madián.

Junto a un pozo se encontró con 7 muchachas, hijas de Jetró, sacerdote de Madián, que quería abrevar los rebaños de su padre, pero unos pastores no se lo permitían.

Moisés las defendió y dio de beber a las ovejas. Jetró le recibió en su casa, se casó con su hija Séfora, con quien tuvo dos hijos, y durante 40 años cuidó de los rebaños.

En 1481 el Papa Sixto IV eligió como programa iconográfico, para decorar la zona inferior de la Capilla Sixtina, el ciclo de Moisés como prefiguración de Cristo.

Entre 1481-82 Botticelli pinto al fresco en la Sixtina “Las pruebas de Moisés”. Esta pintura hay que analizarla de izquierda a derecha. Narra los acontecimientos entre la salvación de las aguas del Nilo y la entrega de las Tablas de la Ley, época poco tratada en el arte.

Moisés, ataviado con túnica amarilla y manto verde se sitúa en la parte inferior derecha y mata al agresor egipcio, huye al desierto de Madián, se enfrenta a los pastores, abreva los rebaños de las hijas de Jetró y es agasajado.(p. 214)

En la parte superior izquierda, Moisés se descalza por mandato de Dios para entrar en tierra sagrada y escucha la misión que le encomienda Yahvé.


3 – LA ZARZA ARDIENTE (MISIÓN: LIBERAR A ISRAEL)

Un día, cuando Moisés estaba apacentando los rebaños se le apareció el Señor en una zarza que ardía sin consumirse.

Le pidió que se descalzara porque estaba pisando tierra sagrada y le dijo: Yo soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob. He oído las tribulaciones de mi pueblo y he bajado para librarle de las manos de los egipcios y hacerle pasar a una tierra fértil y espaciosa.

Yahvé hizo que Moisés fuera ante el Faraón, para que sacara a los hijos de Israel de Egipto y les condujera a las tierras de Canaán, la Tierra Prometida, de donde procedían (actual Estado de Israel).

Le dio el poder de hacer milagros con la vara que llevaba en la mano e hizo que le acompañara su hermano Aarón.

El episodio de la zarza que  arde sin consumirse, mediante el cual Yahvé revela a Moisés la misión de regresar a Egipto y liberar a su pueblo, fue muy representado en el arte y supone el inicio de la vida pública de Moisés.

Los artistas medievales respetaron el relato  bíblico en el que Yahvé se manifiesta mediante la voz, por lo que se suele representar la mano de Dios saliendo de la zarza, ya que una pintura no tiene sonido. (p.215)

4 – LAS 10 PLAGAS DE EGIPTO

Moisés y Aarón se presentaron ante el Faraón y le pidieron que permitiese abandonar Egipto al pueblo de Israel, pero éste no aceptó, por lo que Yahvé le castigó enviando a los egipcios diez plagas:
1.  Las aguas se convirtieron en sangre.
2.  Las ranas invadieron el país.
3.  Egipto fue invadido por los mosquitos.
4.  El país fue invadido por unas moscas muy dañinas.
5.  La peste asoló Egipto.
6.  Las úlceras cubrieron a los hombres y los animales.
7.  El granizo terminó con las cosechas.
8.  Una nube de langostas arrasó el país.
9.  La niebla oscureció Egipto durante 3 días.
10. En la misma noche murieron los hijos primogénitos de los egipcios.
Cuando Moisés y su hermano mayor Aarón piden al Faraón que libere a los israelitas, Aarón arroja su vara o cayado ante él y se convierte en serpiente. Este milagro ha sido muy representado en el arte. (p.216)


5 – LA PASCUA (CORDERO ASADO Y PAN ÁCIMO)
Dijo Yahvé a Moisés que reuniera a los hebreos y tomaran un cordero de un año, sin mancha, y reunidos por familias lo inmolaran al atardecer.

Deberían marcar las puertas de sus casas con esa sangre y se comerían la carne del cordero asado con lechugas silvestres y pan ácimo (ázimo) es el pan que se elabora sin levadura.

Durante la comida estarían de pie, llevarían puesto el cinturón, ir calzados y con el báculo en la mano, porque debían estar preparados para la marcha, ya que esa misma noche Yahvé enviaría un ángel para matar a los primogénitos de los egipcios, pero en sus casa pasaría de largo porque las puertas estarían manchadas con la sangre del cordero.

Ese día sería para ellos memorable y lo celebrarían solemnemente generación tras generación. Este fue el origen de la Pascua de los judíos.

El episodio de la cena de la Pascua judía presenta a los personajes de pie, portando el bastón en la mano, reunidos en torno a la mesa con el cordero. (p. 217)

El tema es una clara prefiguración de la Última Cena.

Por otro lado, el sacrificio del cordero pascual se identificó desde el arte Paleocristiano con la muerte de Cristo en la cruz.


6 - EL PASO DEL MAR ROJO.
El Faraón, asustado por la matanza de los primogénitos egipcios, permitió la salida de los israelitas de Egipto. Pero más tarde envió un ejército que les alcanzó en el Mar Rojo.

Moisés extendió su brazo hacia el mar, el viento dividió las aguas y permitió el paso de los hebreos, pero el ejército egipcio quedo sepultado bajo las aguas. (p. 218)

El episodio es interpretado como el poder salvador del Bautismo.


7 – EL MANÁ Y EL AGUA. (MISERICORDIA)

El pueblo de Israel anduvo errante por el desierto durante 40 años, antes de establecerse en la Tierra Prometida.

Al faltarles los víveres, Dios les envió el maná, un alimento blanco con un sabor parecido a la torta de harina de trigo amasada con miel. Cada mañana caía del cielo hasta que llegaron a la Tierra Prometida.

Para obtener agua Dios le dijo a Moisés que con la vara tocase en la peña y de ella brotaría agua para beber.

En la Edad Media se asimiló el agua al bautismo  y la roca al costado de Cristo en la cruz, siendo un tema muy popular en las catacumbas. (p. 220)

Los milagros de Moisés dan de comer y beber a su pueblo y están relacionados con las obras de Misericordia. (p. 219)

El maná simboliza la Eucaristía, al igual que los alimentos ofrecidos por Melquisedec a Abraham.


8 - LAS TABLAS DE LA LEY

El Monte Sinaí se cubrió de truenos y relámpagos y de sonido de trompetas. Dios descendió sobre el Sinaí en medio del fuego e hizo que Moisés subiera a la cumbre. Se oyó la voz de Dios que dio a su pueblo los Diez Mandamientos.

Dios le entregó a Moisés el Decálogo escrito en dos tablas de piedra (Las Tablas de la Ley). Este es el episodio más destacado de la vida de Moisés. La iconografía suele representar la Mano de Dios entregándole las Tablas. (p. 221)

Moisés permaneció durante 40 días en el monte y cuando bajó encontró a su pueblo adorando un becerro de oro, llevado por la indignación rompió las Tablas. Las danzas y la adoración del becerro se identifican con el demonio. (p. 222)

Cuando Dios perdonó a los israelitas, Moisés volvió a subir al Sinaí donde permaneció otros 40 días. Allí recibió otras tablas iguales a las anteriores, su cara resplandecía y de su frente salían rayos luminosos.

Moisés construyó el Arca de la Alianza, un arca de madera, cubierta de oro por dentro y por fuera, en la que se guardaron las Tablas de la Ley, que sirviese como objeto de culto a su pueblo.


9 – MARCHA HACIA LA TIERRA PROMETIDA

Un año estuvieron los hebreos al pie del Sinaí, después reanudaron la marcha hacia la Tierra Prometida.

Cuando llegaron al límite de la tierra, Moisés envió 12 hombres, uno de cada tribu, entre los que se encontraba Josué y Caleb para explorar el territorio.

Al cabo de 40 días regresaron portando granadas, higos y un gran racimo de uvas, que portaban entre dos hombres, pero anunciaron que esas ciudades estaban fortificadas y tenían hombres valerosos.

Ante tales noticias los hebreos se asustaron y Dios se enojó de nuevo. Jehová les dijo que de todos los que salieron de Egipto con más de 20 años ninguno entraría en la Tierra Prometida, excepto Josué y Caleb.
 
El tema de las uvas de Canaán, entendido como símbolo eucarístico, portadas por Josué y Caleb se representa poco en el arte. (p. 223)

10 – LA SERPIENTE DE BRONCE

En otra ocasión que los hebreos se volvieron nuevamente contra Dios y Moisés, Yahvé les castigó enviando unas serpientes venenosas que mordieron y mataron a muchos.

Arrepentidos pidieron a Moisés que intercediera entre ellos y Dios. El Señor le dijo que hiciera una serpiente de bronce y la colocase sobre un asta y los que la mirasen sanarían.

Fue interpretada como una contraposición a la serpiente del pecado original y como una prefiguración de Cristo sanador en la cruz. (p. 224)


11 – LA PROFECÍA DE BALAAM

Después de conquistar la ribera del Jordán, los hebreos acamparon frente a Jericó. Balac, su rey, se asustó ante la llegada de un pueblo tan numeroso e hizo que el célebre adivino Balaam les maldijera.

Balaam se puso en camino  montado en su burra, pero un ángel con la espada desenvainada le impedía el paso y la burra le dijo a Balaam “Qué te he hecho para que por tres veces me hayas fustigado”.

Entonces Balaam pudo ver al ángel y regresó. Cuando estaba con el rey bendijo desde lo alto del monte a los hebreos y habló del futuro que esperaba a aquel pueblo.

Se suele representar al adivino con su burra. (p. 225)


12 – MUERTE DE MOISÉS.

Moisés hizo jurar a los israelitas que fueran fieles a Yahvé y bendijo a las 12 tribus. Después puso sus manos sobre Josué para que todos le obedecieran, tal y como le había dicho Dios que hiciese.

Luego subió al Monte Nebo y Yahvé le mostró Canaán. Le dijo que mirase la Tierra Prometida a Abraham y a Jacob, pero que no entraría en ella. Y Moisés murió.

La iconografía suele situar a Moisés en la cima del monte Nebo, solo o con el arcángel San Miguel, contemplando a lo lejos la Tierra Prometida. (p. 225)

Moisés es un profeta libertador que anuncia la venida del Salvador. 

El origen iconográfico de los cuernos se explica por una mala traducción de la Vulgata, confundiendo San Jerónimo el término radiante con cornudo.

En la Edad Media el atributo de los cuernos se hizo muy popular. Cuando Miguel Ángel esculpió su Moisés, el atributo había caído en desuso.

A partir del Renacimiento se le representa como un anciano de larga y poblada barba, en ocasiones bífida, de cuya frente parten dos rayos luminosos, sosteniendo las Tablas de la Ley. (p. 226)


ENTRADA EN LA TIERRA PROMETIDA: JOSUÉ Y LAS MURALLAS DE JERICÓ

Moisés simboliza el Éxodo, Josué, heredero de Moisés y  jefe de las tribus de Israel, personifica la conquista de la Tierra Prometida.

Yahvé ordenó a Josué que atravesaran el río Jordán. Cuando los sacerdotes que llevaban el Arca de la Alianza se acercaron al río, las aguas se dividieron y los israelitas pudieron pasar.

Después tomaron la ciudad de Jericó y el país de Canaán y la tierra conquistada se dividió entre las 12 tribus de Israel.
Josué, al igual que Moisés, es una prefiguración de Jesús.

Uno de los hechos más importantes de su vida es el Paso del Jordán, que comparte simbolismo bautismal con el paso del Mar Rojo de Moisés. Pero hay una diferencia iconográfica en la ausencia del ejército egipcio y la presencia del  Arca de la Alianza. (p. 227)

La conquista de la ciudad de Jericó fue una estrategia pacífica ideada por Josué. Los sacerdotes desfilaron tocando las trompetas alrededor de las murallas de Jericó. El séptimo día el sonido de las trompetas venció a la ciudad y cayeron las murallas de Jericó. (p. 227)


LOS JUECES: LA FUERZA DE SANSÓN Y DALILA.

Desde la muerte de Josué los israelitas dejaron de ser gobernados por un solo jefe y se regían por un consejo de ancianos.

En los momentos difíciles dependían de los jueces o jefes militares, entre los que destaca Sansón.

Sansón tenía una fuerza extraordinaria. En una ocasión ató a los rabos de 300 zorras teas encendidas y las dejó correr por los campos de los filisteos para que convirtieran en ceniza el trigo y los olivares.

Los filisteos se vengaron de él a través de la traición de Dalila. Ella al conocer que su fuerza radicaba en su cabello, se lo cortó mientras dormía. Dalila, la nueva Eva, corta las 7 trenzas de Sansón que duerme embriagado en su regazo. (p. 228)

De este modo los filisteos le pudieron capturar, le sacaron los ojos y le castigaron a mover la rueda de un molino.

Posteriormente los filisteos llevaron a Sansón al templo para burlarse de él. Pero Sansón, que había recuperado la fuerza, se colocó entre dos columnas, sacudió el edificio y el templo se derrumbó, pereciendo él y más de 3000 filisteos.

Sansón es el equivalente bíblico del personaje mitológico   Hércules y personifica la lucha de los israelitas contra los invasores filisteos.

Se le representa como un hombre robusto y barbado que va desnudo o viste pieles, siendo su atributo la maza o la quijada del asno, con la que mató a 1000 filisteos.


LOS REYES: SAÚL, DAVID, SALOMÓN

SAÚL (1025-1010 A.C.), LA MELANCOLIA y LA MÚSICA DE DAVID

Samuel en nombre de Jehová le dijo que hiciese una guerra de exterminio, pero le perdona la vida al rey Agag quedándose con parte de sus ganados.

Entonces Samuel se dirigió a Belén para ungir como rey al joven pastor David. Saúl cayó en una profunda melancolía y le recomendaron que escuchase música. De este modo David, que tocaba muy bien el arpa, fue a vivir con el rey y se convirtió en su favorito.

Su iconografía es escasa. Rembrandt pinto sus accesos de melancolía calmados por el sonido del arpa de David. (p. 230)


DAVID (1010-955 A.C.): LA LIBERTAD

Una de las iconografías más difundidas de David es como rey músico, portando un arpa o cítara.

Tras la muerte de Saúl, David fue reconocido como rey de todas las tribus y amplió el reino de Israel, con capital en Jerusalén.
David, hijo de Jesé, es un antepasado de Cristo y una prefiguración.

La descendencia de David configura el tema iconográfico del árbol de Jesé o árbol genealógico de Cristo.

David protege a su rebaño como Cristo Buen pastor y como Abel.
El episodio más representado es su lucha contra el gigante filisteo Goliat.

Su iconografía desde el arte paleocristiano es de un joven imberbe vestido con túnica corta, con un hombro al descubierto y armado con una honda.

En otras ocasiones se le representa victorioso con la cabeza del filisteo Goliat en su regreso a Jerusalén, anticipando la entrada triunfal de Cristo. (p. 231) Debemos destacar las pinturas de David venciendo a Goliat de Caravaggio en la Galería Borghese de Roma y en el Museo del Prado.

Este episodio inspiró a los escultores del Renacimiento: Donatello, Verrocchio y Miguel Ángel, y del Barroco como Bernini, que vieron en él un símbolo de la libertad.


DAVID Y BETSABÉ: EL ARREPENTIMIENTO

Durante un paseo David vio a Betsabé, una bella mujer dándose un baño y se enamoró de ella, enviando a su esposo Urías a primera línea de combate, para que muriese y poder casarse con ella.

El encuentro con Betsabé en el baño sirve para tratar el desnudo en un tema bíblico (p. 232)

El profeta Natán le recriminó este comportamiento, por el que se arrepintió. Yahvé le perdonó y David compuso los Salmos en los que anuncia la llegada del Redentor.


SALOMÓN (955-935 a.C.): OPULENCIA Y JUSTICIA

Salomón era hijo de David y Betsabé y se le atribuyen 3 libros bíblicos: El Cantar de los Cantares, los Proverbios y el Eclesiastés.

Su sabiduría quedó plasmada en el juicio de las dos madres que cuando se ahogó un bebé reclamaban al otro bebé como suyo.

Acudieron al rey a pedir justicia. Salomón ordenó que partiesen al niño por la mitad y dieran la mitad a cada una, pensando que la auténtica madre no permitiría tal atrocidad como así sucedió. (p. 233)

Mandó construir su famoso Templo de Salomón y allí trasladó el Arca de la Alianza.

Según narra el Libro del Éxodo de la Biblia, el Arca de la Alianza contenía las Tablas de la Ley: tablas de piedra en las cuales figuraban inscritos los Diez Mandamientos que Dios entregó a Moisés en el Monte Sinaí.

La visita de la reina de Saba personifica la fama y la opulencia del reino de Salomón y su mítico templo, que custodiaba el Arca de la Alianza junto a la Menorá o candelabro de los 7 brazos. (p. 234)


EL CISMA DE ISRAEL Y DE JUDÁ

A la muerte de Salomón el reino se dividió, formando el reino de Judá con capital en Jerusalén, que se mantuvo fiel al judaísmo, y el reino de Israel con capital en Samaria, que adoptó cultos politeístas.


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Moisés y David by Maite

TEMA 7 – NUEVA ICONOGRAFÍA DESPUES DE LA PAZ DE LA IGLESIA (313): EL ANTIGUO TESTAMENTO (I)


TEMA 7 – NUEVA ICONOGRAFÍA DESPUES DE LA PAZ
DE LA IGLESIA (313): EL ANTIGUO TESTAMENTO (I)


LA PAZ DE LA IGLESIA (313)

El Edicto de Milán, promulgado en el año 313 d.C. y firmado por Constantino I el Grande, estableció la libertad de culto en el Imperio romano, dando fin a las persecuciones contra los cristianos.  Después de la Paz de la Iglesia (313) se inicia una nueva etapa en el arte cristiano, incorporándose escenas del Antiguo y del Nuevo Testamento.


EL GÉNESIS, LA CREACIÓN DEL UNIVERSO

Dios empleó 6 días en crear el universo. En el primero separó la luz de las tinieblas; en el segundo hizo el firmamento; el tercer día separó las aguas de la tierra; el cuarto creó los astros, el sol y la luna; el quinto y el sexto día pobló la tierra de seres vivos. El séptimo día descansó y lo santificó.

Dios creó a su imagen y semejanza al primer hombre, Adán, hecho de barro y después le dio una compañera, Eva, formada de una costilla de Adán.

El Tapiz de la Creación de la Catedral de Gerona tiene en el centro a un Cristo helenístico, joven e imberbe, con nimbo crucífero. Aparece sentado y rodeado de 8 escenas de la Creación. 

Sobre su cabeza la paloma del Espíritu Santo sobrevuela las aguas, situadas entre el ángel de las tinieblas y el de la luz. A la izquierda está la separación de las aguas y a la derecha la creación del firmamento. A sus pies la gran escena con la creación del mundo animal. A la derecha aparece Adán entre los animales y a la izquierda Eva saliendo del costado de Adán. (p. 181)


EL PARAISO: ADÁN Y EVA, EL PECADO ORIGINAL

Dios creó el Jardín del Edén, regado por el Tigris y el Éufrates, con hermosos árboles y animales. El Paraíso era un idílico jardín, un oasis de delicias.

Allí instaló a Adán y Eva, permitiéndoles comer de todos los árboles salvo del árbol de la ciencia del Bien y del Mal, porque si comían morirían.

Adán y Eva fueron el tema ideal para la representación del desnudo humano.

Adán y Eva simbolizan el sacramento del matrimonio, hasta que éste se identificó con los Desposorios de la Virgen.

La serpiente, el más astuto de los animales, dijo a Eva que si comían los frutos del árbol de la ciencia sus ojos se abrirían, serían como dioses y conocerían el bien y el mal. Eva comió e hizo que Adán también los probara.

Se avergonzaron de su desnudez y se cubrieron con hojas de higuera. Cuando Dios preguntó a Adán porque habían comido, éste culpó a Eva y ella a la serpiente. Fueron expulsados del Paraíso.

Al hombre le dijo que mediante el sudor de su rostro comerá el pan, hasta que vuelva a confundirte con la tierra, ya que polvo eres y en polvo te convertirás. Dios dijo a la mujer que pariría a sus hijos con dolor y su marido la dominaría.

Eva trae la desgracia al género humano igual que lo hizo Pandora en la Mitología. Frente a ellas la Virgen María, pisará la cabeza de la serpiente y al convertirse en la madre de Jesús nos liberará.

La iconografía habitual del Pecado Original presenta a Adán y Eva situados simétricamente a ambos lados de un árbol, normalmente un manzano. (184)  En cambio El Pecado Original y la Expulsión del Paraíso pintados por Miguel Ángel en la Capilla Sixtina, no presenta a Eva como la única culpable, ya que es Adán quien recoge el fruto prohibido del árbol. Sin embargo la serpiente tiene busto y cabeza de mujer.


CAÍN Y ABEL, LA VIOLENCIA

Caín y Abel fueron los dos primeros hijos de Adán y Eva. Caín cultivaba la tierra y Abel apacentaba el ganado.

El Señor miraba con agrado a Abel y sus presentes, por lo que Caín furioso mató a su hermano. A partir de ese momento la violencia se extendió. 

Abel es una prefiguración de Cristo, representado como el Buen Pastor y su muerte violenta presagia la de Cristo.

Caín, asimilado en ocasiones a Judas, es el primer asesino de la Historia Sagrada.

La Biblia no precisa el arma homicida, por lo que ésta presenta variaciones iconográficas: bastón, piedra, azada, etc. (p. 185)


NOÉ Y EL DILUVIO, DECAULIÓN Y PIRRA EN LA MITOLOGÍA

Adán tuvo un tercer hijo llamado SET, que era fiel a Dios, pero con el tiempo  sus  descendientes se mezclaron con los de Caín y Yahvé se arrepintió de haber creado al hombre y decidió exterminarlo con un Diluvio Universal.

Noé, uno de los descendientes de Set, era el único hombre justo en la tierra y Dios quiso Salvarle. Le mandó construir un arca de madera de 3 plantas para que entrara en ella toda su familia y una pareja de animales de cada especie.

La lluvia cayó sobre la tierra durante 40 días y 40 noches. Noé soltó una paloma que regresó con una rama de olivo. Noé obedeciendo una orden de Dios, salió del arca con su familia y los animales y en agradecimiento ofreció un sacrificio al Señor.

Dios hizo un pacto  y dijo que ya no habría más diluvios y apareció el arco iris como señal de aquella alianza, la primera entre Yahvé y los hombres.

El arca prefigura la nave de la Iglesia que conducirá Cristo hacia la salvación de las almas.

Noé será el inventor de la viticultura. Abusará del vino sin conocer sus efectos y se embriagará, siendo descubierto por sus hijos dormido y desnudo.           

En este sentido podemos conectarle con Dionisos o Baco, Dios del Vino.      (p. 187)


LA TORRE DE BABEL, LA CONFUSIÓN DE LENGUAS

Los descendientes de los hijos de Noé se extendieron por Armenia. Construyeron una ciudad e intentaron hacer una torre que tocara el cielo.

Cuando Yahvé comprobó su soberbia decidió confundir sus lenguas para que no se entendieran unos a otros. Dios los dispersó en las 4 direcciones de la tierra y así dejaron de edificar la ciudad a la que se llamó Babel o Confusión.

En el siglo XVI La Torre de Babel de Brueghel el viejo resume lo efímero de las construcciones humanas, advirtiendo contra su vanidad y orgullo desmedidos.


LOS PATRIARCAS: ABRAHAM, ISAAC, JACOB Y JOSÉ

Los hebreos, nómadas y pastores, tuvieron una organización patriarcal.

Sus jefes eran los patriarcas con la doble función de jueces y sacerdotes.

Entre ellos destacan: Abraham, Isaac, Jacob y José.

José fue el primero en dejar de ser nómada al establecerse en Egipto.


ABRAHAM 

Abraham (siglo XX a.C.) era descendiente de Noé, nació en Mesopotamia y fue el organizador del pueblo hebreo.

Es venerado por judíos, cristianos y musulmanes.

Desde el arte paleocristiano se le representa como un anciano de largos cabellos blancos.


ABRAHAM, LOT Y MELQUISEDEC

Dios se apareció a Abraham y le dijo que se dirigiera a la tierra que le mostraría, donde le haría padre de un gran pueblo.

Abraham se puso en camino con su esposa Sara, su sobrino Lot, sus sirvientes y ganados y llegó a la tierra de Canaán (Palestina o Judea)

Después Abraham se fue a la ciudad de Hebrón y Lot se instaló en Sodoma

Sodoma fue saqueada y Lot capturado. Abraham acudió en su ayuda y liberó a Lot y al resto de prisioneros.

Al regresar victorioso, Melquisedec, rey y gran sacerdote de Salem, salió a su encuentro para darle su hospitalidad y su bendición, correspondiéndole Abraham con la décima parte del botín que había conseguido. (Diezmo)

El encuentro entre Abraham y Melquisedec es una prefiguración de la Eucaristía al ofrecer el sacerdote pan y vino y otorgar su bendición. 

Rubens se inspira en el Génesis para mostrar el momento en que Melquisedec y sus criados entregan pan y lujosas vasijas de vino a Abraham, quien obsequia al sacerdote con el diezmo de su botín. El sacerdote aparece en el escalón superior, simbolizando la primacía de la Iglesia. (190)

En el mosaico de Rávena Melquisedec aparece con vestiduras sacerdotales presentando en el altar los panes, junto a Abel que ofrece el cordero (191)


ISMAEL E ISAAC

El Señor había prometido a Abraham multiplicar su descendencia como las estrellas del cielo, pero éste seguía sin tener hijos, por lo que, de acuerdo con Sara, tomó por mujer a su esclava egipcia, Agar.  Agar le dio un hijo, Ismael.

Años más tarde Dios le anunció a Abraham por medio de 3 ángeles que Sara, a pesar de su avanzada edad, sería madre de Isaac, de cuya descendencia nacería el Mesías.

El anuncio de los 3 ángeles, denominado la hospitalidad de Abraham ha sido muy representado en el Arte y se considera una prefiguración de la Anunciación a María.

La pintura barroca subrayó la hospitalidad de Abraham, que recibe a los emisarios divinos, lava sus pies y les invita a suculentos manjares. Este episodio se puede relacionar con la hospitalidad de Melquisedec y con la Última Cena.


SODOMA: LOT Y SARA, ESTATUA DE SAL

Los graves pecados de Sodoma provocaron la cólera de Dios y éste anunció a Abraham su destrucción. Sólo se salvaron Lot, el único justo, y su familia.

Cuando salieron de Sodoma, Sara, esposa de Lot, se volvió para ver la incendiada ciudad, a pesar de la prohibición de Dios, por lo que quedó convertida en estatua de sal.  (p. 193) (Relacionado con Orfeo y Eurídice)

El lugar que ocuparon Sodoma, Gomorra y otras ciudades que sufrieron el mismo final formó el Mar Muerto, un mar con una gran concentración de sal.
Los dos episodios más representados de Lot son la destrucción de Sodoma y su embriaguez. Ambos están relacionados con Noé.

Tanto el incendio como el Diluvio son consecuencia de la cólera divina de la que sólo se salvan los justos.

Las hijas de Lot, creyendo aniquilado el género humano, embriagaron a su padre para forzarle a cometer incesto con ellas y así perpetuar la raza. Noé y Lot serán víctimas de la enajenación que produce el vino. (p. 194)


AGAR E ISMAEL, PROGENITOR DE LA RAZA ÁRABE

En una ocasión Sara vio que Ismael trataba mal a Isaac, por lo que dijo a Abraham que expulsara de la casa a Agar y a su hijo, de esta manera no tendría que compartir la herencia con Isaac.

Abraham les dio pan y agua y repudió a Ismael y a su madre para que se dirigiesen a Egipto, junto a la familia de Agar. (p. 194)

En el desierto les faltó el agua y el alimento y Agar lloró con desesperación, pero un ángel se le apareció a Agar y le anunció que Dios convertiría a Ismael en la cabeza de una gran nación. (p.195) (Museo del Romanticismo)
Ismael se casó con una mujer egipcia y se convirtió en el progenitor de la raza árabe.


SACRIFICIO DE ISAAC (SACRIFICIO DE IFIGENIA)

Yahvé quiso probar a Abraham y le dijo que le ofreciera a su hijo Isaac en sacrificio en la montaña.

Isaac viendo que llevaban un cuchillo, fuego y leña, preguntó dónde estaba la víctima para el holocausto.

Abraham hizo un altar, puso leña encima, y sobre ella colocó a Isaac atado. Pero cuando levantó el cuchillo para matarle, un ángel le detuvo pues su obediencia había sido probada. Dios bendijo a Abraham y a su descendencia

Abraham vio un carnero enredado un zarzal y se le ofreció en sacrificio a Yahvé en lugar de su hijo. (Puerta del cordero de León) (Sacrificio de Ifigenia)

La sumisión de Isaac cuando es conducido a su sacrificio es una prefiguración de Cristo cuando hará el camino del calvario para morir en la cruz. (p. 196)
El sacrificio de Isaac pintado por Caravaggio presenta al joven gritando y revelándose, por lo tanto cuestiona la aceptación del su destino de Isaac. (196)


MATRIMONIO DE ISAAC CON REBECA

Abraham envió a su fiel criado Eliezer a Mesopotamia para buscar esposa para su hijo entre su propia familia.

Rebeca, nieta del hermano de Abraham, era una joven muy bella y caritativa, que estaba sacando agua de un pozo, y dio agua a Eliezer y a sus camellos. Esta fue la señal para saber que era la esposa adecuada para Isaac. (197)

Poussin, en Rebeca y Eliezer (Louvre), elige el momento de la entrega de un brazalete de compromiso a la novia. (198)

Regresaron a Canaán, donde Rebeca contrajo matrimonio con Isaac. Es una prefiguración de los Desposorios de la Virgen.

Rebeca tardó en tener descendencia y Yahvé le dijo que de su vientre saldrían dos pueblos divididos. El mayor ha de servir al menor.

Del seno de Rebeca salieron dos gemelos. El primero era pelirrojo, todo cubierto de vello, y se llamó Esaú. El segundo nació agarrando con la mano el talón de Esaú y su nombre fue Jacob.


ESAÚ VENDE SU PRIMOGENITURA POR UN PLATO DE LENTEJAS

Esaú era un excelente cazador y en cambio Jacob era un pastor sedentario.
Isaac prefería a Esaú, pero Rebeca se inclinaba por Jacob.

Un día Esaú regresó de cazar hambriento y vio a Jacob con un plato de lentejas y le pidió que se lo diera. Éste aceptó a cambio de su primogenitura

Esaú aceptó y Jacob exigió que lo jurara y le contó lo sucedido a su madre.

Esaú vendiendo su primogenitura por un plato de lentejas prefigura y se contrapone a las tentaciones a las que el demonio sometió sin éxito a Cristo.


REBECA Y JACOB  ENGAÑAN A ISAAC Y OBTIENE LA BENDICIÓN

Isaac, anciano y ciego, pidió a su favorito, Esaú, que cazara un animal y lo cocinara para él. Después de haberlo comido le bendeciría.

Rebeca escuchó esto y aconsejó a Jacob para que se adelantara a su hermano y consiguiese la bendición de su padre.

Jacob le llevó a su madre 2 cabritos de su rebaño para que los cocinara al gusto de su padre. Rebeca hizo que se pusiera las ropas de su hermano, envolvió sus manos y cuello con las pieles de los cabritos y le entregó el guiso para que se lo llevara a Isaac.

Cuando Isaac le preguntó, Jacob respondió: “yo soy tu primogénito Esaú, he hecho lo que me mandaste y come de mi caza para que me des la bendición”. Isaac le pidió que se acercara para tocarle y ver si era Esaú. Después comió y bebió y le dio su bendición. Tema muy representado en el S. XVII (p. 200)


LA HUÍDA: EL SUEÑO. LA ESCALERA DE JACOB Y EL DIEZMO

El odio de Esaú hacia su hermano hizo que Rebeca le aconsejara marcharse a casa de su tío Labán en Mesopotamia.

En un descanso en el viaje apoyó la cabeza en una piedra y se quedó dormido. En sueños vio una escalera que llegaba desde la tierra hasta el cielo. Dios se encontraba en el extremo superior y por ella subían y bajaban los ángeles. Desde allí Yahvé prometió a Jacob una larga descendencia que sería bendecida por todos los pueblos de la tierra. (P. 201)

William Blake (1800) hizo una escalera helicoidal que asciende en torno a un haz de luz por la que caminan figuras oníricas. (p.201)

Al despertar tomó la piedra, sobre la que había apoyado la cabeza, y la alzó como señal de su visión y llamó a aquel lugar Betel, haciendo el voto de que si Yahvé le protegía en el viaje sería su Dios y esa piedra sería la casa de Dios y de todo cuanto me diere le entregaré el diezmo. Diezmo de Jacob a Yahvé.

Jacob marchó a Mesopotamia. Guardo los ganados de su tío Labán y se casó primero con su hija Lía y después con su hija Raquel. De su descendencia surgirán las doce tribus del pueblo de Israel.


REGRESO DE JACOB A CANAÁN. AHORA SERÁ ISRAEL

Años más tarde Jacob regresó con su numerosa familia a Canaán. Durante el viaje una noche se le apareció un hombre misterioso que comenzó a luchar contra él hasta el amanecer y le dejó cojo. (p. 203).

Jacob comprendió que había peleado contra un ángel y le pidió su bendición. El ángel le dijo que su nombre ya no debía ser Jacob, sino Israel y le bendijo. 

Con este cambio de nombre el pueblo hebreo también es llamado israelita.
A su llegada a Canaán Esaú y Jacob (Israel) se abrazaron y reconciliaron.

Los doce hijos de Jacob (Israel) fueron los jefes de las doce tribus de Israel.


JOSÉ Y JESÚS, VIDAS PARALELAS

1-   EL ODIO: JOSÉ ES VENDIDO POR SUS HERMANOS

Jacob tuvo 10 hijos con Lía y 2 con Raquel, José y Benjamín, el último de la estirpe. De sus doce hijos el más querido para Jacob fue José, lo que provocó el odio de sus hermanos.

Un día Jacob envió a José a apacentar el ganado con sus hermanos, pero éstos decidieron matarle. Rubén intentó salvarle y dijo que era mejor que le tiraran a un pozo en el desierto y así lo hicieron después de quitarle la túnica.
Después vieron una caravana de mercaderes que se dirigían a Egipto y Judá dijo a sus hermanos que era mejor vender a José como esclavo a los mercaderes que mancharse las manos con su sangre.

Después mancharon la túnica de José con la sangre de un cabrito y se la entregaron a Jacob para que pensara que José había muerto devorado por fieras. Éste lloró amargamente la pérdida de su amado hijo.

Diego Velázquez plasmó magistralmente este tema en “La túnica de José” que se encuentra en el Monasterio de El Escorial (p. 204)


2-   LA ESCLAVITUD EN EGIPTO: JOSÉ Y LA MUJER DE PUTIFAR

Al llegar a Egipto los mercaderes le vendieron a Putifar, un funcionario al servicio del faraón. Protegido por Yahvé empezó a prosperar y se convirtió en su mayordomo y en el hombre de confianza de Putifar.

José era un joven de buena presencia, por lo que la mujer de Putifar intentó seducirle, aunque él la rechazó en diversas ocasiones. El episodio más representado es la castidad de José. La película “La Corte del Faraón” con Antonio Banderas, como el casto José. (p. 205)

Un día en la huída ella le agarró por el manto y él no pudo recuperarlo. En venganza, sintiéndose despreciada, acusó a José ante su marido de haber intentado forzarla, enseñando la túnica como prueba.

Putifar creyendo a su esposa le hizo meter en la cárcel.


3-   JOSÉ INTERPRETA LOS SUEÑOS DEL FARAÓN, GOBERNADOR

Yahvé se compadeció de él y al poco tiempo interpretó los sueños del copero mayor y el panadero principal del Faraón. Al copero le dijo que a los 3 días recuperaría la libertad y al panadero que sería decapitado. Todo sucedió según las interpretaciones de José.

El copero y el panadero con los que José coincide en la cárcel fueron equiparados con el buen y el mal ladrón junto a los que Cristo fue crucificado.

Con el tiempo el Faraón tuvo dos sueños que nadie pudo explicar, por lo que el copero le comentó al Faraón las dotes adivinatorias de José. Éste ordenó que le llevaran a José.

José interpretó que las 7 vacas gordas y las 7 vacas flacas presagiaban que Egipto tendría 7 años de abundancia y otros 7 de escasez, por lo que convendría que hiciesen reserva del trigo para los años malos. El Faraón nombró a José Gobernador de Egipto y le entregó un anillo y una esposa.    

Su iconografía se enriquece y aparece con cetro y corona o subido a un carro.


4-   EL PERDÓN: JOSÉ SE RECONCILIA CON SUS HERMANOS

Gracias a la buena administración de José, en la época de escasez Egipto tenía excedentes para vender. Así que Jacob envió a sus hijos, salvo a Benjamín, a comprar trigo a Egipto.

Cuando José vio a sus hermanos, éstos no le reconocieron. José les acusó de espías y les pidió que volvieran a Canaán y regresaran con su hermano pequeño, Benjamín.

Cuando los hijos de Jacob volvieron a Egipto con Benjamín, José les trató con cariño y ordenó que llenaran sus sacos de trigo, pero que metieran una copa de plata en el saco de Benjamín.

Cuando se marcharon fueron perseguidos y acusados de robar la copa de plata y Benjamín fue condenado a servirle como esclavo. Pero su hermano Judá se ofreció a sustituirle para evitar que su padre muriera de pena. Entonces José se dio a conocer, perdonó a sus hermanos e hizo que Jacob fuera a Egipto con toda su familia a la tierra de Gessen, la más fértil de Egipto. (p. 207)

Hay un gran paralelismo entre la vida de José y la de Jesús. José será traicionado, descenderá a los Infiernos (pozo y cárcel), alimentará a su pueblo y perdonará al prójimo. Pero a diferencia de Cristo, José encontrará un destino dichoso.


LA HISTORIA DE JOB, LA FIDELIDAD Y LA PACIENCIA

Job era un hombre recto que gozaba de una buena situación económica y vivió en la época en que murió José.

El Demonio dijo a Yahvé que había colmado a Job de bienes por lo que su virtud no era sorprendente. Dios le respondió al Demonio que dejaba en sus manos todo cuanto poseía Job, pero que a él no te tocase.

A partir de aquel momento cayeron sobre Job muchas desgracias. Le arrebataron sus ganados y mataron a sus siervos, el fuego redujo a cenizas sus ovejas y pastores, le robaron sus camellos, un fuerte viento del desierto destruyó la casa de su hijo mayor durante una fiesta y todos quedaron sepultados. Pero Job, lleno de dolor, exclamó: “Dios me lo dio, Dios me lo quitó" ¡Bendito sea su santo nombre!

Satanás siguió probando a Job con una llaga que le cubría de pies a cabeza, obligándole a estar en un estercolero por la repugnancia que producía en los demás, pero todo lo soportaba sin la menor queja. (p. 209)

Las calamidades que soportó el justo y santo Job encarnaban la paciencia y la fe inquebrantable. Además se anticipan a la Pasión de Cristo y la salvación de las almas.

Ante aquella situación, su mujer le recriminó por la paciencia que estaba demostrando y añadió. ¡Maldice a Dios y muérete!

Job sufrió el escarnio del Demonio, de sus amigos y de su esposa. El teatro medieval convirtió a la esposa de Job en el prototipo de la arpía.

Pero Dios le recompensó por todo lo que había sufrido y por la fidelidad que le había demostrado. Recuperó la salud, formó una nueva familia, le aumentó considerablemente los bienes que Satanás le había arrebatado y prolongó su vida durante muchos años.


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